¿Qué es la autoestima?

Detrás de cada comportamiento, pensamiento, emoción, etc. encontramos la autoestima, ella maneja el modo en el que actuamos con los demás y con nosotros mismos. Es un filtro a través del cual valoramos nuestras experiencias y cómo nos comportamos ante ellas, generando un sentimiento positivo o negativo hacia nosotros, si nos vemos competentes, lograremos aceptarnos.

La autoestima está formada por varios componentes, entre ellos el “autoconcepto” y la “autoimagen”.

El autoconcepto es la visión que una persona tiene de sí misma, de sus cualidades, según las situaciones que ha experimentado a lo largo de su vida. Consiste en el conjunto de características que sirven para definirnos, por ejemplo “soy inteligente” “soy alto/a”, “soy cariñoso/a”, etc. ​

No es innato sino que se va transformando frecuentemente según las experiencias que vivimos, empezando en nuestra infancia, la cual es uno de los periodos críticos.

Este concepto que formamos de nosotros mismos puede coincidir con la idea que los demás tienen de nosotros o no, incluso puede no coincidir con la realidad.

La autoimagen hace referencia a la propia percepción en conjunto, siendo una dimensión más reflexiva, valorativa. Es la representación mental, el resultado de agrupar los conceptos que tenemos sobre nosotros, sumando el cómo nos vemos, a lo que percibimos que los demás piensan sobre nosotros, es decir, la imagen que creemos que proyectamos. Serían las etiquetas que nos ponemos, por ejemplo “soy una persona honesta porque siempre digo la verdad y la gente confía en mí”. Es más estable en el tiempo que el autoconcepto, no se modifica tan fácilmente por hechos concretos (por ejemplo, si nos consideramos honestos porque siempre decimos la verdad pero un día puntual mentimos, nuestra autoimagen seguirá intacta, ya que es un hecho aislado) y  también empieza a formarse en la infancia.

Estas dos dimensiones se integran formando la autoestima, un concepto más amplio y de carácter emocional. Podría decirse que es el concepto que tenemos de nuestra valía, la importancia que le damos a las cualidades que poseemos.

Se basa en todos los pensamientos, sentimientos y experiencias sobre nosotros mismos que hemos ido recopilando durante nuestra vida. Todo ello nos genera una imagen propia que produce un sentimiento positivo o negativo hacia nuestra persona. Dependiendo de ello, tendremos una actitud concreta hacia nosotros mismos: si nos aceptamos, crearemos una autoestima saludable, si no, tendremos una autoestima pobre que nos mantendrá en una lucha interna por salir de infravaloración.

Una vez introducida la autoestima como concepto, os animo a leer nuestro siguiente post en el Blog de Gavima: «¿De dónde nace la autoestima y por qué es tan importante?«.

"Imagen de la Entrada del Blog: '¿Qué es la autoestima?'"
Alicia Gavilán Mateos

Alicia Gavilán Mateos

Psicóloga